La Biblia de las Américas (© 1997 Lockman)
`Sin embargo tienes esto: que aborreces las obras de los nicolaítas, las cuales yo también aborrezco.La Nueva Biblia de los Hispanos (© 2005 Lockman)
"Sin embargo tienes esto: que aborreces las obras de los Nicolaítas, las cuales Yo también aborrezco.
Reina Valera Gómez (© 2010)
Pero tienes esto, que aborreces las obras de los nicolaítas, las cuales yo también aborrezco.
Reina Valera (1909)
Mas tienes esto, que aborreces los hechos de los Nicolaítas; los cuales yo también aborrezco.
Sagradas Escrituras (1569)
Mas tienes esto, que aborreces los hechos de los nicolaítas, los cuales yo también aborrezco.
`Sin embargo tienes esto: que aborreces las obras de los nicolaítas, las cuales yo también aborrezco.La Nueva Biblia de los Hispanos (© 2005 Lockman)
"Sin embargo tienes esto: que aborreces las obras de los Nicolaítas, las cuales Yo también aborrezco.
Reina Valera Gómez (© 2010)
Pero tienes esto, que aborreces las obras de los nicolaítas, las cuales yo también aborrezco.
Reina Valera (1909)
Mas tienes esto, que aborreces los hechos de los Nicolaítas; los cuales yo también aborrezco.
Sagradas Escrituras (1569)
Mas tienes esto, que aborreces los hechos de los nicolaítas, los cuales yo también aborrezco.
ἀλλὰ τοῦτο ἔχεις, ὅτι μισεῖς τὰ ἔργα τῶν Νικολαϊτῶν ἃ κἂγω μισῶ.
Revelation 2:6 New American Standard Bible (© 1995)
'Yet this you do have, that you hate the deeds of the Nicolaitans, which I also hate.
'Yet this you do have, that you hate the deeds of the Nicolaitans, which I also hate.
235 [e]
6 alla
6 ἀλλὰ
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6 Conj
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3778 [e] touto τοῦτο this DPro-ANS |
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3754 [e] hoti ὅτι that Conj |
3404 [e] miseis μισεῖς you hate V-PIA-2S |
3588 [e] ta τὰ the Art-ANP |
2041 [e] erga ἔργα works N-ANP |
3588 [e] tōn τῶν of the Art-GMP |
3531 [e] Nikolaitōn Νικολαϊτῶν , Nicolaitans N-GMP |
3739 [e] ha ἃ which RelPro-ANP |
2504 [e] kagō κἀγὼ I also PPro-S1C |
3404 [e] misō μισῶ . hate V-PIA-1S |
6.
Nicolaítas.
Una de las sectas heréticas que atormentó a las iglesias de Efeso y Pérgamo (vers. 15) y tal vez a otras. Ireneo identifica a los nicolaítas como una secta gnóstica: "Juan el discípulo del Señor, predica esta fe [la deidad de Cristo], y mediante la proclamación del Evangelio procura quitar aquel error que había sido diseminado entre los hombres por Cerinto, y mucho tiempo antes por los llamados nicolaítas, que son una rama de aquella falsamente llamada 'ciencia', a fin de poder confundirlos y persuadirlos de que sólo hay un Dios que hizo todas las cosas por su Palabra" ( Contra herejías iii. 11.1). Hay también evidencia histórica de que más o menos un siglo después hubo una secta gnóstica llamada de los nicolaítas. Algunos padres de la iglesia que nos informan respecto a esta secta (Ireneo, Contra herejías i. 26, 3; Hipólito, Refutación de todas las herejías vii. 24), identifican a su fundador con Nicolás de Antioquía, uno de los siete diáconos (Hech. 6: 5). No sabemos si esta tradición relativa a Nicolás el diácono es correcta, pero la secta puede ser la misma mencionada por Juan. Los seguidores de esta secta parecen haber enseñado, por lo menos en el siglo II, que las obras de la carne no afectan la pureza del alma, y por consiguiente no tienen que ver con la salvación.
Nicolaítas.
Una de las sectas heréticas que atormentó a las iglesias de Efeso y Pérgamo (vers. 15) y tal vez a otras. Ireneo identifica a los nicolaítas como una secta gnóstica: "Juan el discípulo del Señor, predica esta fe [la deidad de Cristo], y mediante la proclamación del Evangelio procura quitar aquel error que había sido diseminado entre los hombres por Cerinto, y mucho tiempo antes por los llamados nicolaítas, que son una rama de aquella falsamente llamada 'ciencia', a fin de poder confundirlos y persuadirlos de que sólo hay un Dios que hizo todas las cosas por su Palabra" ( Contra herejías iii. 11.1). Hay también evidencia histórica de que más o menos un siglo después hubo una secta gnóstica llamada de los nicolaítas. Algunos padres de la iglesia que nos informan respecto a esta secta (Ireneo, Contra herejías i. 26, 3; Hipólito, Refutación de todas las herejías vii. 24), identifican a su fundador con Nicolás de Antioquía, uno de los siete diáconos (Hech. 6: 5). No sabemos si esta tradición relativa a Nicolás el diácono es correcta, pero la secta puede ser la misma mencionada por Juan. Los seguidores de esta secta parecen haber enseñado, por lo menos en el siglo II, que las obras de la carne no afectan la pureza del alma, y por consiguiente no tienen que ver con la salvación.